Muestra pictórica de José G. Alvarez

Por Prensa Peruana



Parte de la inmensa obra de uno de los más importantes pintores del movimiento indigenista peruano José G. Alvarez será mostrada al público a partir del 12 de diciembre, en el Club Social Miraflores a las 7 de la noche como un merecido homenaje al patriarca de la pintura arequipeña. La muestra, auspiciada por la Universidad Ricardo Palma estará abierta al público hasta el 23 de diciembre en la galería del Club. Su nieta, Soledad Alvarez de Galdo inaugurará esta retrospectiva del gran artista arequipeño recordado por ser el primero en dar vida a la escena de la fundación incaica y española de la ciudad blanca.

José G. Alvarez, es considerado uno de los más valiosos pintores que dominó el óleo con fuertes y gruesos empastes, donde conjugó ternura y pasión, realizando así un valioso aporte a las artes.

Jugó un papel importante en la cultura y la formación de las nuevas generaciones de artistas al fundar el Centro Artístico de Arequipa en 1890, lugar donde se reunieron los más importantes artistas plásticos, calígrafos, fotógrafos, arquitectos, músicos y poetas de la época, convirtiéndose Don José G. Álvarez en el sostenedor principal del Centro, donde fiel a su personalidad bondadosa enseñó gratuitamente -por más de 40 años- a los diversos jóvenes que luego se convirtieron en miembros y alumnos como Pedro Paulet, Francisco Mostajo, Carlos Álvarez, Enrique Masías, Victor Martínez Málaga, Teodoro Núñez Ureta, los hermanos Vargas, Federico Molina, Manuel Domingo Pantigoso y Eduardo López de Romaña.

José G. Álvarez es hasta hoy el gran desconocido de las formaciones idiosincráticas y de sensibilidades culturales arequipeñas a pesar de haber sido uno de sus actores fundacionales más distinguidos de la ciudad blanca. Fue –a decir de muchos críticos- uno de los espíritus más arequipeño de cuantos se han conocido en la cultura nuestra, incomparable como sucede con los grandes creadores, grande en su humildad, grande en su condición de pintor-obrero y sumamente grande y magnánimo en su doble calidad de padre no solo de su familia, sino, principalmente de aquella gran familia a la que asumiera como tal: Arequipa.

Como señalara el Dr. Francisco Mostajo: "aprovechado alumno en la escuela de Bellas Artes del Centro Artístico en su juventud y decidido promotor del mismo en toda su vida, A don José nunca le gustaron los halagos, de ninguna índole, no se sentía merecedor de ellos por no haber consumado su gran deseo de estudiar en Europa y por la naturaleza misma de su personalidad, nunca busco la notoriedad pero su mérito fue reconocido por todos en la Arequipa de su tiempo".

Gradualmente con la vasta obra pictórica de José G. Álvarez se fueron definiendo las características centrales de lo que habría de ser llamada "Escuela Arequipeña de Pintura". Álvarez es el primero en Arequipa que empasta gruesamente el óleo. Lo comienza -con su peculiarísimo estilo- cargando con blanco la esporádica pincelada y luego el final rellenado de la obra con factura gruesa, como en los retratos que hiciera a Enrique Masías a la edad de su temprana muerte, y en pequeños paisajitos en los que la carga del blanco en además la transposición al empaste de la refulgente luminosidad de Arequipa. De allí que nace la corriente que define con características muy peculiares a este gran artista que es mucho más que poesía al reconocérsele su inefable amor y afán por todas las disciplinas artísticas.

Su impecable gestión cultural lo llevó a fundar paralelamente con el Centro Artístico de Arequipa, la revista "Arequipa Ilustrada". Además generó la participación de los poetas César "Atahualpa" Rodríguez Olcay, Percy Gibson, así como de los fotógrafos Max T. Vargas, Martín Chambi y del científico y gran amigo personal, Pedro Paulet. Veinte de sus mejores obras será expuestas como homenaje del 12 al 23 de diciembre en el Club Social Miraflores, en Av. Malecón de la Reserva 535, en Miraflores. En la inauguración, el poeta Manuel Pantigoso Pecero abrirá el programa con una conferencia sobre la vida y obra del artista.

Día: Viernes 12 de diciembre
Lugar:Club Social Miraflores
Malecón de la Reserva 535, Miraflores
Hora: 7 P.M.
INGRESO LIBRE

Cuestión de vida o muerte

Por Prensa Peruana



Por: Mary Domínguez

Sebastián, tenía ocho años y cientos de sueños por realizar; pero el destino le cambió su sonrisa. Jugando, cogió una bomba de racimo y sin saber lo que era, explotó. Perdió el brazo y el ojo derecho, el izquierdo quedó destrozado y perdió cuatro dedos de la mano izquierda. José Manuel quedó malherido en agosto de 2004 al pisar una mina mientras jugaba con su hermano en las alturas de Ayacucho. Quedó sin piernas y sin el brazo izquierdo. Sus vidas y sus sueños cambiaron, sus sonrisas oscurecieron, sólo lágrimas y soledad rodearon sus mundos. No querían vivir. El papá de mi hijo – un capitán de la Policía Nacional- murió en Rupa Rupa, en Tingo María al tratar de desactivar una mina, los efectos y consecuencias van más allá de lo que uno puede pensar. No sobrevivió para contarme la historia, pero el dolor que le causó a nuestro hijo –cuando apenas tenía cinco años- no se olvida. Con su inocencia corrió a abrazar a su pequeña prima Silvana para decirle, en llanto, que su padre había muerto. Cada lágrima que a Sebastián, José Manuel o a Carlos y cientos de miles de niños y familias les ha causado la explosión de bombas de racimo u otros explosivos no se pueden borrar, quedan grabados como fotografías eternas en nuestra mente.

Mi voz se quiebra y el recuerdo viene en silencio, una foto vale más que mil palabras, quienes recuerden una historia no querrán volver a vivirla, a verla, no querrán sentir de nuevo el olor a muerte y dolor.

Las bombas de racimo son explosivos. Una bomba de racimo o bomba «clúster» es un explosivo de caída libre, o dirigida, lanzada desde el aire o desde la superficie, que al alcanzar una altura concreta, medida por un altímetro, se abre dejando caer cientos de sub-municiones o bombetas de diversos tipos, de alto poder explosivo, antipista, antipersona, perforantes, incendiarias, etc, las mismas que a menudo, se quedan sin explotar.

De éstas, hay millones en el mundo. En este instante, mientras escribo alguien es una cifra más en las estadísticas de víctimas por la explosión de una de éstas submuniciones y las consecuencias son solo dos: mutilación o muerte.

Por su apariencia inofensiva, muchos niños las han confundido con juguetes, un frasco de perfume u otra cosa atrayendo la curiosidad de niñas y niños. Según afirman los expertos “si su proliferación y uso continúan el resultado será una crisis humanitaria incluso peor que la plaga causada por las minas terrestres”.

Este tipo de municiones se encuentran en los arsenales de la mayoría de los ejércitos. Algunos gobiernos y organizaciones civiles, como Greenpeace, lograron concertar este año, en mayo, un acuerdo donde se prohíbe el uso de bombas de racimo, realizado en Dublín por más de cien países, esperando lograr deponer la tendencia de países no firmantes, como Estados Unidos, para respetar la prohibición de esas terribles armas explosivas La «Convención sobre las bombas con submuniciones», dispone que cada Estado firmante «se comprometa a nunca emplear estas armas, bajo ninguna circunstancia».

Debido a su amplitud y al gran número de sub-municiones, hasta 300, esta arma es usada para atacar a objetivos militares dispersos, como concentraciones de tropas, columnas de blindados, o para negar el uso de una zona o instalaciones como el caso de aeródromos. Pero también debido a estas características, a menudo hiere y mata a civiles, especialmente cuando es usada en zonas urbanas.

Las submuniciones esparcidas tienen un rango de fallo de entre el 5% y 30%, por lo que pueden quedar bombas enterradas sin explotar siendo peligrosas tiempo después de terminada la guerra, especialmente por los niños por sus formas llamativas. Varios países han usado este tipo de arma en conflictos diferentes a pesar de causar problemas muy serios bajo el derecho humanitario internacional.

Una campaña internacional, la Coalición de las Bombas de Racimo fue establecida en el 2003 para poner fin al uso, la producción, la transferencia y el almacenamiento de estas armas. Hoy en día, más de 160 ONG de todo el mundo se están dedicando a la educación, la investigación, y la presión a diferentes gobiernos para cambiar sus políticas acerca de estas armas.

No obstante los fabricantes de estas armas han desarrollado importantes esfuerzos en los últimos años para minimizar los peligros de las municiones no explotadas, incorporando mecanismos de autodestrucción pasado un lapso de tiempo y aumentando los controles de calidad para reducir el porcentaje de municiones defectuosas.

El texto que se ha logrado es el que reclamaba la sociedad civil: sin excepciones, sin lagunas ni retrasos para su entrada en vigor. Nada de esto se hubiera logrado sin que una mano se uniese a otra. Estas armas actúan de forma indiscriminada, no distinguen entre blancos civiles y militares y siguen causando muertos y heridos mucho tiempo después de que un conflicto haya finalizado.

Además de las muertes que se producen durante y después de las operaciones, tienen graves consecuencias socioeconómicas para las poblaciones que viven en esas zonas. Durante largo tiempo desde que acaba el conflicto, impiden el uso de carreteras, el acceso a las escuelas y hospitales, y el desarrollo de la agricultura en países donde ésta es crucial para la supervivencia.

Desde los años sesenta, este armamento ha sido utilizado en numerosas guerras y también en varios de los conflictos más recientes: Kosovo (1999), Afganistan (2001), Irak (2003) y Líbano (2006). Así como en países africanos como Sudán y Sierra Leona, entre otros. Se trata de armas contrarias a las disposiciones generales de los Convenios de Ginebra al violar el principio de discriminación entre civiles y militares. En torno a 100.000 personas han muerto como consecuencia de las bombas de racimo, un 98% de ellos civiles.

La organización Handicap International ha denunciado que 400 millones de personas están amenazadas por millones de submuniciones procedentes de las bombas de racimo que no explotaron cuando fueron lanzadas en algún conflicto. Presentó en Ginebra el informe "Círculo de impacto: la marca fatal de las bombas de racimo en las personas y sus comunidades". En él se revela que hasta el momento se han utilizado en todo el mundo 360 millones de esas bombas, que pueden liberar hasta 300 submuniciones. Entre el 5 y el 30% (entre 22 y 132 millones) no llegan a explotar, por lo que se convierten en un grave peligro para la población. El informe analiza el impacto socioeconómico en los 25 países y regiones en los que se han usado y que, oficialmente, ha causado 13.306 muertes aunque podrían llegar hasta las 100.000 a causa de la falta de información. Casos donde se han usado La organización Handicap International ha elaborado recientemente un informe que, por primera vez, ofrece datos concretos y documentados sobre las víctimas de las bombas de racimo en todo el mundo.

Este informe ha logrado documentar 11.044 muertes confirmadas, que pueden ser atribuidas directamente a las bombas de racimo. Se trata sólo de víctimas confirmadas y no de estimaciones o extrapolaciones, por lo que esta organización calcula que el total, en los 23 países analizados, puede ascender a unas 100.000. El 98% de las muertes fueron civiles, frente a números muy bajos correspondientes a militares y personal dedicado a tareas de desminado. La mayoría de esas víctimas civiles se producen cuando las personas se dirigen a sus actividades diarias o su trabajo.

El pasado mes de mayo, en Dublín, 111 Gobiernos aprobaron por consenso el texto del Tratado que prohibirá las bombas de racimo. El texto se abrirá a la firma de los Estados el próximo mes de diciembre, en Oslo, y sólo será necesaria la firma y ratificación de 30 Estados para que entre en vigor. A partir de ese momento, será ilegal la fabricación, uso, venta o almacenamiento de todos los tipos de bombas de racimo. Es ahora o nunca, es cuestión de vida o muerte.

El nuevo gabinete

Por Prensa Peruana

Nuestro colaborador Juan Carlos Goicochea, le da un vistazo al nuevo gabinete Simon.

Cherman: "El arte gráfico es de todos"

Por Prensa Peruana

Cherman es un artista gráfico peruano que intenta reinvindicar a las figuras más representativas de nuestra patria, a su peculiar estilo hace que los peruanos nos enorgullezcamos de lo que es nuestro. Dánae Rivadenyra y Roy Palomino estuvieron con el en la inauguración de la muestra de su arte, en la librería Ksa Tomada.


Dulce Espera

Por Prensa Peruana

Por Juan Pablo Bustamante.

Cuando no entiendes cómo es que, si estás con zapatillas y medias hasta casi las rodillas, te ha entrado arena entre los dedos de los pies, y no te importa, es que tienes el síntoma de la dulce espera, la que te destruye los nervios. Cuando después de haber pasado hora y media sentado en un micro que te cobra más pasaje del que debe, a través de una pista sin asfalto y que te deja botado en un cerro frente a un conjunto de cajas de madera acomodadas en líneas paralelas en las que viven apretadas familias de once hermanos y quince primos, no te importa, es que tienes –abre bien los ojos– fanatitis aguda, con problemas cardiocerebrales. Y es que sí importa que no te importe: te estás cagando la vida y no te importa. A este punto, si te hubieran robado los setenta soles que tenías en la mochila que dejabas por uno y otro lado y con los que te ibas a matricular en tu clase de inglés y que no lo hiciste porque estabas un poco más allá del fin del mundo –Pachacútec, para ser más exactos, el último paradero de Ventanilla, el distrito más rompebolas del Callao–, y no te hubiera importado, ahí sí estuvieras declarado víctima de homicidio culposo, por lo que te hubiera hecho tu señora madre al llegar a casa. Por lo menos, agradece que no hubieras muerto virgen. O eso espero, huevas tristes.

Lo primero que piensas al llegar al la Universidad Católica del Callao, ubicada al otro lado del mundo, es «por fin». Luego, «nunca más regreso». Primer error: has venido desde tan lejos con un solo propósito: ver a Mario Vargas Llosa. Está bien que el señor no sea santo de tu devoción y que te haya gustado más “Cien años de soledad” que “La ciudad y los perros” (cosa que nuestro bienamado primer escritor nacional no debe enterarse si no quieres tener tú también un ojo morado), pero qué carajos, es Mario Vargas Llosa, el escritor peruano más importante actualmente. (Controlarse vallejistas, el término escritor normalmente está asociado a la narración. Está bien que esa asociación sea incompleta y por ende incorrecta, pero es la que se usa y es como más se entiende). Pero dime, ¿sabes a qué hora va a llegar? No. No lo sabes. Me lo suponía. Llegaste a las doce y media. ¿Y Vargas Llosa? Un cuarto para las cinco. Nomás vino y se fue. Segundo error: no has almorzado. Y esta vez no tienes tu Cifrut salvador. Tercer error: no trajiste cámara fotográfica. Dime qué clase de comunicador vas a ser. Cuarto error: estás enfermo y no puedes fumar. Tienes que esperar como cinco horas, no puedes almorzar porque no hay dónde hacerlo, no has traído cámara con qué entretenerte y no hay dónde conseguir un cigarro. Perdiste, loser, perdiste.

Bueno, después de todo ya estás ahí. Lo tienes al frente y te das cuenta de que su cabello era más blanco de lo que creías. Te das cuenta también de que, improvisando unas pequeñas palabras como símbolo de agradecimiento a tan pobre espectáculo brindado en su honor, no es exactamente el chugal shady de todos los mac daddys. Pero qué importa. Se está yendo. Tienes un libro de él y un lapicero. Te acercas. Y, como siempre, después de que uno se acerca, todos los que se orinaban de miedo por hacer lo que tú acabas de hacer, pierden la vergüenza, porque ya alguien la pasó por ellos, y se acercan también. Tu libro es el tercero que coge, y estás a punto de decirle tu nombre, cuando mira alrededor y ve que hay demasiadas personas, y justo a partir de tu libro decide solo firmarlos.

Así que, mi querido huevas tristes, te comiste todo este día para obtener tu premio: una MVLL que tú mismo pudiste haberla hecho más bonita y con mucho más estilo.

El gol de Perú

Por Prensa Peruana

Anoche todos los peruanos sentimos que por fin nuestro seleccionado jugaba con pundonor y garra. Se le hizo frente a Argentina con un equipo joven y renovado, poniéndole difícil el partido a la albiceleste. Luego de un gol en contra, en el minuto 92' Johan Fano remata un magistral pase de Juan Vargas. Captura de Tv: Ombloguismo.

Guayasamín "No creo que en Cuba se violen los Derechos Humanos"

Por Prensa Peruana

Pablo Guayasamín es hijo del recordado pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín y dirige el Fundación del mismo nombre. Se encuentra en Lima para dictar un conferencia sobre la vida y obra de su padre. Conversamos con él sobre su trabajo a favor del arte y su vision política de latinoamerica.

Inyectores, nuevo disco, nuevos planes

Por Prensa Peruana

Esta semana un equipo de PrensaPeruana.com estuvo en un potente Jammin' con la banda peruana Inyectores. Roy Palomino y Juan Barrueto conversaron con el líder de la banda quien contó sobre el lanzamiento del nuevo disco y los planes para este año.

Las cosas se cuentan solas

Por Prensa Peruana


Por Mary Domínguez

Dice Piero –en una de sus canciones- que las cosas se cuentan solas. La historia ha demostrado que es cierto. Con el pasar del tiempo cada hecho nos ha ido contando, a pasos lentos pero seguros, qué y cómo ocurrió. Durante los años de terror, la población fue gradualmente insensibilizada de manera inconciente, sin darse cuenta. Justos pagaron por pecadores. La Cantuta fue uno de ellos, la desaparición y posterior muerte de nueve estudiantes y un profesor fue real. Retrocedamos en el tiempo, cuando los asesinatos del caso Cantuta estaban en plena luz pública, el general Nicolás De Bari Hermoza hizo oídos sordos. No escuchaba, no veía no hablaba. Pero el presidente del Comando Conjunto ya había reconocido el hecho, en los primeros días de abril de 1993, tal como lo señalan versiones periodísticas de la época: “que en la fecha y hora (01:30 hrs) hubo un operativo en La Cantuta a cargo de la II Región Militar”. Por su lado, el entonces segundo jefe de la II Región Militar lo desmintió asegurando que “el personal a sus órdenes no participó en operativo alguno”. Pero ésta contradicción según –precisan la prensa y los congresistas de entonces- confirmaría (a su parecer) que el secuestro y asesinato de las diez personas fue hecho por un grupo de integrantes del ejército al mando de un general”.

La Comisión de Derechos Humanos del Congreso Constituyente decidió investigar. Se citó a los entonces ministro de Defensa, general Víctor Malca; al presidente del Comando Conjunto de las FFAA, general Nicolás De Bari y al ex comandante general de la II Región Militar, general Luis Salazar Monroe. Paralelamente el Poder Judicial, por medio del XI Juzgado desestimó el recurso de Habeas Corpus interpuesto por los familiares de los desaparecidos con el argumento “no se verificó la preexistencia del grupo, supuestamente secuestrado y por lo tanto, los hechos materia de investigación son improbables”. ¡Increíble¡

La madre de uno de los estudiantes interpuso una segunda acción de habeas corpus ante el XIV juzgado por esa razón fue citado el general Nicolás De Bari quien negó la realización del operativo y la detención de los estudiantes y del profesor. Pasaron los meses y el mismo general fue citado en octubre –por segunda vez- para ampliación del atestado. En esa ocasión, reveló –pese a su negación anterior- que “sí tiene conocimiento que el día 18 de julio (…) miembros de las Fuerzas Armadas incursionaron en la residencia estudiantil de la Universidad Nacional Enrique Guzmán y Valle, que fue ordenado por el Comando Conjunto y derivado a las regiones para que se cumpla”.

El diario La República, el 17 de abril de 1993 tituló sobre el enjuiciamiento a militares autores de la matanza de La Cantuta y también el hecho que la Comandancia General del Ejército identificó a los culpables. Todo ello, según la versión que obra en la Comisión de Constitución del CCD, sería un comando operativo del Servicio de Inteligencia del Ejército integrado por diecisiete oficiales, los que incursionaron en la residencia estudiantil.

Sin embargo, el martes 20 de abril el general Hermoza se negó a responder preguntas concretas. A su salida del Congreso, leyó ante la prensa una declaración escrita denunciando la existencia de una campaña de desprestigio contra las fuerzas del orden y advirtiendo que “no lo va a tolerar”. Hermoza se había negado a responder, sobre todo las preguntas hechas por Fernando Olivera, para que diera a conocer la identidad de los autores del secuestro y asesinato de los estudiantes y un profesor de La Cantuta.

Según el mismo diario “Hermoza se comunicó con el Ministro de Defensa Víctor Malca y con Palacio de Gobierno pidiendo satisfacciones por lo que denominó ‘el maltrato’ recibido por parte de Olivera”. Este –como se recordará- fue suspendido por 60 días aunque para la opinión pública la severa sanción de dos meses estaba originada por la referencia que hizo el entonces parlamentario a la regla menstrual y al carácter de la representante Martha Chávez.

La oposición le reclamó al general por sus graves acusaciones y opiniones que violaron el mandato constitucional que les prohíbe a los militares ser deliberantes, entre otras cosas.

El reclamo contra Hermoza y el pedido de su destitución, se hizo general. Sin embargo, la respuesta de Hermoza no se hizo esperar sacó los tanques a las calles. Un documento que coincidía con el leído por éste fue firmado por trece camaradas de armas de la más alta graduación. El paseo de tanques se repitió como una respuesta a la pregunta que se negaba el general a precisar quiénes secuestraron y asesinaron a los nueve estudiantes y un profesor de La Cantuta. .

Los dimes que sí y dimes que no, continuaron. Humillaron al país, a las madres de los estudiantes asesinados, a la familia de un maestro universitario. Humillaron la memoria de nueve peruanos. Nueve recuerdos que no deben olvidarse. Nueve peruanos que aún claman justicia. Nueve seres humanos que enterraron, después de asesinarlos cruelmente, sin nombre. Son rostros que no debemos olvidar. Sarcásticamente -para sellar el apoyo a Hermoza- el hoy acusado Fujimori lo “exculpó” en el caso de La Cantuta y agregó “ni el CCD puede pedir su cambio”.

El caso siguió igual y el generalísimo tan fuerte como el 5 de abril. Pero, como las cosas se cuentan solas el país se cansó. Jóvenes, niños, mujeres, y jubilados dijeron: ¡basta ya! La dictadura de Fujimori y Montesinos terminó tras las rejas. Ahora esperan –contra viento y marea- ser exculpados, proclamando inocencia. Pero la justicia llega, así dicen, y creo, creemos. Creen los familiares y cree el Perú, porque aunque camine a paso lento debe existir. Allí debe estar. Porque la muerte de éstos peruanos no debe ser en vano. Porque las lágrimas de una madre no deben olvidarse. Porque el dolor no cesa, porque aún esperan, porque es una necesidad urgente. Porque esa luz de esperanza, aunque no calma la rabia y el dolor contenido, nos grita a todo pulmón que la peor opinión es el silencio.

Entrevista: Salomón Lerner "¿no que Fujimori quería matar a Alan García?"

Por Prensa Peruana

Se cumplen 5 años de la entrega del Informe Final de la Comisión de la Verdad, y nuestro colaborador, Juan Carlos Goicochea, entrevistó a quien fuera su presidente, Salomón Lernes Febres. Hace una somera evaluación del trabajo de la Comisión, así como una autocrítica, le responde a los fujimoristas y hasta a Alan García. Interesante colofón sobre fujimoristas y comics.